miércoles, noviembre 21, 2012

¿Quién soy yo? 
Este saco de carne y huesos, esta sombra que se desvanece. El sentimiento sin nombre, la emoción profunda, la piel, las ventanas.

miércoles, noviembre 07, 2012

PERMANENCIA


Y me quedo contigo, y te quedas en mí, no sólo tu olor, ni el calor de tu cuerpo. Comienza la semana y todavía te siento como si estuvieras recostado junto a mí.

Cada vez que regresas eres mío. Los minutos, las horas, me saben a eternidad. Y en la boca conservo tu sabor a durazno, dulce y ácido a la vez.

Los labios conservan la textura de los tuyos y me confortan en los momentos de soledad, de ausencia de ti.

La impronta permanente de tu ser en mi memoria, en el papel de mis pensamientos y en el deseo de mi cuerpo.

Te adoro porque apareces en cada amanecer, y la sombra de tu cariño me protege de la rutina del día a día.

Estás en las pequeñas cosas, las cotidianas, las que permiten que mi mundo siga girando.

Te muestras en las mañanas mientras bebo mi café, en las tardes cuando conduzco sin rumbo, en las noches donde salgo a caminar y me prendo un cigarro, mientras recuerdo los besos antes de dormir.

Y te cuento historias frente al espejo, mientras me acaricio el rostro pensando en ti.

Eres ya parte del paisaje de mi caminar en el sendero de la vida. Y las piedras, los árboles, el asfalto, me sonríen como tú. Las gotas de lluvia saben a tí y me cuentan tus secretos inconfesables.

Entraste en mí y te quedaste para siempre. No salgas, el ruido de la ciudad se apaga, y las luciérnagas iluminan el lecho.

jueves, octubre 25, 2012

INCERTIDUMBRE


¿Qué será de mí cuando no vengas?
Cuando tu abrazo no cobije mi soledad, cuando me falte la guía de tus caricias y el olor de tu piel.
Será acaso que mis ojos olvidarán la constelación de los lunares en tu espalda, mi nariz borrará la memoria del olor de tu sudor entre las sábanas, mis manos buscarán las concavidades de otros cuerpos.

¿Qué será de mí cuando te alejes?
Cuando tu presencia huela a sal, cuando no quede rastro de tu calor en el lecho.
Tengo miedo de perderme sin ti, en el océano de tu olvido, en el enfado de una tarde lluviosa.

¿Qué será de mí cuando los ojos se sequen y el corazón se marchite?
Cuando este cuerpo mío ya no reciba la miel de vida que en tu pecho fluye, cuando la piel se fracture por la falta de tu tacto.

Qué será, que fue, que ya no queda nada.

martes, octubre 23, 2012

EL LLANTO



Me gusta llorar en soledad, porque si alguien mira, el segundo previo a que se derrame la lágrima se tiñe de ridículo. Se convierte en un espectáculo macabro donde los demás imaginan mil cosas que causaron el exabrupto.

El llorar es un acto íntimo, donde se libera el dolor añejo, las palabras falsas, los castillos de polvo. Las lágrimas son productos tóxicos donde se desechan los conceptos como amor, dios, camaradería y resurrección. Esas gotas cristalinas son detritus del alma que conmueven de una manera grotesca a los que observan con morbo y se alimentan de las frustraciones ajenas.

Nadie debería jamás beber las lágrimas de otro ser, es una práctica poco higiénica. Tanto se habla de lo correcto que es asistir a los velorios, a acompañar a los dolientes, sin embargo, llegan ahí muchas veces sin conocer al difunto. Afinan sus instrumentos para medir el nivel de dolor real que sienten los que tuvieron la pérdida, califican el momento dependiendo de los alaridos, de los sollozos, del enrojecimiento de los ojos.

Por eso, me gusta disfrutar del llanto en mi habitación, ese templo sagrado donde puedo desnudarme de las caretas que uso en la sociedad. Lleno mi mente de imágenes en orden creciente de nostalgia, para hacer una sinfonía de lágrimas que viscosamente resbalan por mi rostro. Exprimo hasta la última gota, porque también de esto se trata la vida. De morir por los ojos y desgarrarse el alma, para reconstruir después los recuerdos con una visión más clara, lavada con sal y sangre en el amanecer de otra noche sin ti.

jueves, octubre 18, 2012

PUERTA

El pórtico está abierto. Mi bosque te espera, para que descanses tus ojos de las vistas artificiales de la ciudad. Para que comiences a conocer con todos tus sentidos el mundo desnudo, que sientas con la lengua, que veas con el tacto, que h
uelas con los oídos y me percibas vulnerable y tibia.


El pórtico está abierto, sólo un día de distancia al paso que transgrede los límites de mi piel y de la imaginación.


El pórtico está abierto y ya todo dispuesto para recibirte con palmas, flores exóticas que se deshojan con tu mirada, especias picantes que paladeas con tu voraz boca.


El pórtico está abierto y esta es una invitación selecta.

viernes, septiembre 07, 2012

EL BESO



Esa tarde entre almohadones lustrados por el sudor de tantos fajes en tiempo transcurrido, él me besó.

Después de probar tantas bocas, tantas lenguas, salivas de múltiples sabores, lo sentí como el primer beso.

Ese beso con labios temblorosos, tímidos en un inicio pero voraces después de un tiempo.

Entre la distancia que separaba los cuerpos, flotaban pensamientos, miedos, timideces añejas.

En la mente volábamos para el encuentro, surcábamos cielos bajo esa lluvia menuda que cae sin dolor, sólo para prodigar la humedad perfecta que hidrata los sentimientos más dulces.

Fue un beso sin deseo, un beso de prueba, de novedad añorada, beso de hojarasca, beso de cristal de ventana a medianoche sin luna.

De esos primeros besos en una esquina, rápidos, sin expectativa de meter las manos bajo la blusa ni nada más.

De esos besos que te dan justo lo que necesitas, ese tinte de inocencia que sólo se consigue de los seres no profanados por la lujuria.

Sólo sé, que ese beso fue el primero, el único en mis años vividos, el beso de mis sueños infantiles, el beso de Klimt debió sentirse así estoy segura.

Y aquí estoy, a mi edad, esperando la siguiente ocasión para que él me bese y escuchar campanillas en el cliché del amor de mano sudada, del caminar por la alameda, pensando bajo la tempestad... que él me pertenece.

lunes, agosto 06, 2012

TE ESPERO



El hombre que yo espero, está tan ensimismado en sus recuerdos que cuando vuelva al presente, tendrá que buscarme como huella lejana entre el polvo de las sábanas podridas, en los restos de saliva de los besos de aquellos profanadores de tejedoras Penélopes, en las palabras de juglares que cantan las historias de traición como contra-hazañas propias de la guerra de los Ulises carcomidos por las imágenes del pasado.

Esos hombres que recuerdan y sonríen, lejanos, intangibles, no les queda más que a su regreso, cosechar los detritus de las caricias y llevarlos a un pedestal de su museo personal para continuar el ciclo de la contemplación de lo que se perdieron.

REGALO


 A estas alturas del partido ya no me importa qué pienses de mi amor, este amor de uno que fluye en una sola dirección. Este amor que llegó sin avisar, que se filtró reptando hasta la médula y que es de desalojo difícil. Te lo entrego puro y perfecto, vulnerable cual capullo. Si lo arrugas y lo tiras a la basura me da lo mismo, el amor cuando se pare duele, pero vale cada segundo de su palpitar.

Luz, oscuridad y medias tintas



Hay un punto donde se parecen tanto los amaneceres a los ocasos que sólo el tiempo define qué viene después de esa disminución de luz, de esa apariencia azulosa, borrosa, que predispone al hundimiento.
En esos minutos apenas, donde el final es un misterio, es cuando el arma de fuego deseosa por vaciarse, seduce los sentidos y las palmas acarician sensualmente la orilla del gatillo. Y surgen las preguntas sin respuesta, las súplicas sin eco, el dolor arenoso de la soledad. Terminar con esto de una vez, o esperar y ver si esa neblina azul en el horizonte se convierte en sombras o en luz de un nuevo día.

miércoles, agosto 01, 2012

ENCUENTROS


 Es increíble como también los seres con las almas rotas, se encuentran, coinciden, agotados de tanto caminar con los vientres vacíos y las manos llenas de arena.

Porque cada vez que se atreven a amar, la vida les retribuye su esfuerzo con una bofetada de palabras manchadas de ironía.
...

Su corazón en retazos, carne en descomposición, anhelada por el tiempo, buitre de los deshechos.

Estos seres al toparse, se dan besos de fe caduca, de pactos rotos a perpetuidad, de cicatrices existenciales, caricias inversas en las miradas.

Y se van, sin despedirse, sin un hasta luego, sin siquiera preguntar el nombre. Siguen su camino, en la carretera calvario donde tantos humanos han dejado huellas con sus trozos de pies.

martes, julio 31, 2012

COLOR



¿Y qué si amanecí azul, o rojo, o verde, o negro? ¿A quién le importa? Soy un espectro, un chasís de huesos caminando errante por la ciudad. ¿Y qué si esta noche decido quitarme la agonía del diario vivir colgándome de una viga en mi habitación? Mmm pensándolo bien, no sería un fin muy elegante, de cualquier forma mi cuerpo olería mal y así tal vez se den cuenta de que ya nadie respira entre esas cuatro paredes. Pero terminar embarrada de secreciones y dejar sucio el piso no me apetece. Aunque si me cortara las venas estando desnuda en la tina siempre es un cuadro bello y sale bien en las fotos, lástima que esa muerte ya esté tan choteada. Da igual cómo acabe, nadie llorará, es más, si no tengo cuidado de dejar una identificación cerca del cuerpo, puedo terminar en la fosa común, o tal vez en algún laboratorio de disección en la facultad de medicina, eso estaría bien. Al menos se justificaría de alguna forma mi existencia.

Llegué a este lugar con la promesa de amor, de felicidad, de placer y me voy con el paisaje de la realidad de la vida, los órganos destrozados; el cerebro derretido, el corazón roto, el hígado podrido, los ojos quemados, la piel cuarteada, y los pulmones negros; la certeza de que dios no existe y que todos los conceptos positivos son una mentira.

Amanecí sintiéndome azul y esta noche me pondré violeta.

jueves, julio 26, 2012

Calla amor, shhh, ¿escuchas? los capullos de mariposas eclosionan en mi vientre.

viernes, mayo 18, 2012

Frío

En mi corazón siempre es invierno, y mis besos saben a agua congelada.

viernes, marzo 16, 2012

QUISIERA

 Quisiera vivir como tú,
quisiera que el polvo de los muebles supiera a vainilla
tocar las olas con mis manos
y escuchar palabras de amor.

Pero hay imposibilidades,
las fantasías sólo respiran en la imaginación
sé que el océano no empapa mi lecho
y que los susurros son las hojas mecidas por el viento.

Quisiera acariciar la luna con mis besos
ella siempre tan sola allá arriba
ella que nunca alcanza a su amado y
envolverla en un abrazo de hojarasca.

La realidad me marca que son sólo ciclos
el día, la noche, otoño y primavera
cosas que cambian
luz y oscuridad.

Pero en verdad quisiera,
que las hormigas volaran,
que el sudor fuera de canela,
y que alguien me liberara de
esta tumba en el panteón.

martes, enero 17, 2012

Debo alejarme...

De tí, de mí, del nosotros que no existe. De la



 vida, de la muerte, de la piel, de los silencios...
OBRA EN RE-CONSTRUCCIÓN.

Se va liberando el veneno poco a poco,

construyendo ladrillo a ladrillo una muralla que contenga las emociones que se me desbordan.

Porque al final de todo yo he provocado toda esta maraña de pensamientos e ideas platónicas,
 porque soy la única responsable de lo que me pasa.

Porque al mundo ni le va ni le viene.

Porque al mundo no le importo, el sigue girando.

Porque he de sangrar en soledad esta herida.

sábado, enero 07, 2012

AVISO ECONÓMICO.




Te curé las heridas con mis besos, te limpié la memoria con mi piel. Transcurrido un tiempo tú volaste y en mí no derramaste ni una mirada. Partiste con las arcas llenas de caricias, para donarlas a otra mujer, dama que te encontró gozoso, purificado del pasado. Mientras que yo me quedé con el sabor amargo d ...e tus desamores en la boca y más hielo en el corazón.



Ahora convencida de este don que me brindó la naturaleza, me preparo para cobrar por mis servicios. Que al final de cuentas, el amor es cosa de mercenarios, de buitres egoístas, de mutaciones cardiacas y fenómenos. No importa ya que con cada proceso spa, arrastre secreciones viscosas a este órgano que acecha bajo mis costillas, pero que está ya muerto de no latir, de no vibrar en la misma sintonía con otro ser.



Les ofrezco mi virtud para que se aprovechen de ella y mi existencia tenga algún fin.



No les cobraré mucho, qué tanto son unas monedas por mandar al bote de basura los dolores y frustraciones en el ámbito amoroso. Mi cuota es mínima, porque la demanda es alta. Vengan a mí que soy la carroñera del desamor, vengan, aquí todos serán recompensados y cada centavo me agradecerán eternamente mis humildes servicios.




Vengan ahora y olviden que el amor es corrosivo y duele, y arde, reconstruiré estéticamente los huecos, los trozos de carne que se pierden con cada nuevo descarrilamiento.
SILENCIO.




Los silencios siguen siendo más elocuentes que las palabras. Por eso, me sumerjo lentamente en tus pausas, en tu manera de mirarme bajo los ojos cerrados, en las caricias que se esconden en tus puños, en la sal secreta que resbala sobre mi mejilla.



Con tu silencio, te siento más cerca cada vez, y es que hay algo en la vacuidad, donde nada vive, donde ni el amor muere, donde tú por fin existes.



Me envuelve cálidamente tu mutismo, descifrando los misterios de este cariño incomprensible entre los dos. Tú, el silencio de un beso a media tarde con el atardecer de tus piernas en mi cama.