jueves, agosto 03, 2006

LA LOCURA DEL AGOTAMIENTO

En esta madrugada lluviosa y gris mi cerebro está desconectado, un tiempo para deshechar toda la basura mental que embarga mi ser.

Hace días que intento escribir algo, tal vez nuevo, tal vez interesante y que pase por el estricto filtro del razonamiento fluído y conciente, pero los bloqueos de la página en blanco no me dejan avanzar a más de un adjetivo o un artículo de extensión.

Así que ante tal conflicto me aventuré a publicar estas líneas sin sentido, sin más simbolismo que la soledad acompañada sólo por un ordenador obsoleto y una red de mala calidad.

Estoy en el laboratorio como nerda, a altas horas de la madrugada y yo aquí persistente, luchando batallas con augurio de derrota desde que inició la jornada. Los resultados favorables me han abandonado. Los aparatos con nada de humanidad me desafían.

Estoy agotada, sólo el ruido de los refrigeradores y el repiquetear de la lluvia sobre la ventana. Su ritmo monótono me provoca una somnolencia neblinosa. Quiero salir de aquí pero la presión es demasiada.

Ya no puedo más, voy a desistir, basta de escribir sinsentidos. Esta verborrea incoherente se publicará pero no presten demasiada atención. Es un ejercicio de desbloqueo para vomitar las palabras huecas que salen cuando el cansancio habla por la piel.

No hay comentarios.: